martes, 5 de abril de 2011

Un paso hacia la civilización

     Cuando nos referimos a los albores de la vida humana, automáticamente se nos viene a la mente la imagen de uno o más humanos con aspecto primitivo, hablando jergas guturales o teniendo un comportamiento más de animal que de un ser humano.

                (http://galaxiamia.blogspot.com/2008/10/la-guerra-del-fuego-una-pelicula-como.html)
 
     Así es como se da inicio a la historia del film. Una pequeña tribu de Ulhamr, pertenecientes a la especie Neanderthal, pierde el fuego luego de que una tribu “invasora” los atacara y les extinguiera las llamas que utilizaban en labores domésticas (calefacción, comida, etc.). La misión era, de alguna manera, traer de vuelta el fuego a la tribu. Para esto, tres integrantes de los Ulhamr emprendieron la epopeya.
     A lo largo del periplo, los hombres van pasando por diferentes situaciones que los pondrán a prueba en relación a cómo pueden ir sobreviviendo, siendo la más importante aquella cuando uno de los viajeros es capturado por otro grupo de características diferentes. En este punto, se produce un antes y un después en la película.
     La tribu “capturadora” usó al prisionero dentro de sus ceremonias, provocando que este último empezara a visualizar costumbres que para él eran fuera de lo común.
En uno de estas ceremonias, un anciano hizo fuego utilizando una técnica desconocida en entonces, la cual consistía en girar un palo sobre una especie de piedra, provocando la emanación de un leve humo que es el principio para hacer fuego.
     Durante el transcurso de la película podemos notar las diferencias  y semejanzas culturales que tenían ambas tribus (mayor dominio sobre el fuego, una inteligencia más desarrollada al momento de planear una trampa para capturar a hombres de otras tribus, etc.). Sin embargo, si queremos analizar el enfoque evolucionista existente en La Guerra del Fuego, hay que considerar dos factores que son esenciales para entender cómo el mono logra convertirse en lo que somos hoy en día: la dimensión natural y cultural. Mientras la primera se refiere a la simple herencia biológica que puede tener un ser, la segunda abarca a la capacidad de obtener la condición humana a través del aprendizaje (características adquiridas)[1].
¿Cómo se puede explicar esto en una realidad donde, los pocos humanos existentes eran bastante “retrasados”, racionalmente hablando, para poder deducir qué es lo mejor para adoptar como propio?

               (http://thisdistractedglobe.com/wp-content/uploads/2007/08/Quest%20For%20Fire%20pic%201.jpg)
     Bueno, el tema es que aquella tribu que fue capturada y, a la vez testigo de las nuevas prácticas”, eran, como ya se dijo, Neanderthal. ¿Qué tiene el hecho de que hayan pertenecido a esta especie de nuestros ancestros? Simple, porque para los científicos de hoy en día, el Neanderthal “poseía la condición humana, pero se consideraba una especie diferente. Esto, debido a su elevada capacidad craneal equivalente a la del humano actual, llegando, incluso, a ser muchas veces superior”[2]
     Claramente, estábamos en presencia de un humano prácticamente como lo conocemos hoy, en cuanto a su capacidad craneal. Y si bien autores como Darwin plantean que el hombre fue adaptándose de acuerdo al ambiente en donde se iba asentando, lo interesante acá es contemplar lo que postula Boivin, esto es el cómo el prisionero se fue adecuando a nuevas prácticas y culturas para así poder adoptarlas y enriquecer su día a día. Cabe mencionar que el Ulhamr no sólo aprendió el arte del fuego, sino que también podemos considerar como evolución, la aparición de los lazos de afecto con una mujer  que los siguió una vez que se habían escapado de las manos enemigas y emprendían su viaje de vuelta.
     Lo importante es resaltar que, según Boivin, las diferentes culturas o tribus prehistóricas su fueron adaptando y complementando unas con otras, ya sea por medio de enfrentamientos, choques (como los que se ven en la película) o por simple acercamiento más ligado al afecto que a la violencia.
     Pareciera ser que existe unanimidad en considerar esta tesis del “adaptamiento” como válida dentro del evolucionismo.
 No obstante, existen postulados, como las Tesis Tomistas, las cuales enfatizan que “todas las especies existen desde siempre paralelamente, es decir, sin depender de otra”.[3] Claramente, corresponde a otro punto de vista, uno más ligado al individualismo, dejando de lado la preponderancia de los lazos y comunicación entre las especies para alcanzar avances.
¿Cuál tesis o enfoque es más certero? Dejémosle ese trabajo a los científicos.

Sebastián Mora
B-02



Boivin, M. Constructores de Otredad. "La construcción del otro por la diferencia"

[2] http://es.wikipedia.org/wiki/Homo_neanderthalensis
[3] http://www.slideshare.net/deptofilo/evolucionismo-1016300

No hay comentarios:

Publicar un comentario